Este post de hoy nació de mi reflexión sobre una de las frases que suelo escuchar –y a veces repetirme– cuando converso con amistades, familiares y contactos sobre nuestras trayectorias, intereses y las cosas que hacemos: ‘Es que esto es lo mío’.
Como dirían algunos tradicionalmente, ‘hay mucha tela que cortar’ respecto a este tema de enfocarnos en lo que nos plazca y orientar a las personas a tener cuidado con aquello que pretendan decirnos sobre lo que vayamos logrando. Y algo para comenzar es que todos tenemos algo que nos hace sentir vivos, y comunmente llegar a reconocerlo en nuestras etapas de la vioda nos lleva por rutas muy individuales.
Puede ser que lo que nos haga sentir vivos y plenos sea una habilidad, un pasatiempo, una experiencia particular profesional o simplemente una forma de hacer las cosas creativas que nos conecta con todo. Y cuando logramos instantes de satisfacción, es cuando ahí nos decimos: «Es que esto es lo mío«, porque en el fondo sabemos que ahí y haciendo eso justamente es donde nos sentimos pertenecer.
Nota: En esta publicación de Instagram que ves abajo compartí un corto de un audio, una de mis prácticas de improvisación, tocando sobre el tema.
Sin embargo, muchas veces olvidamos que el camino para abrazar plenamente lo que es de uno no siempre es fácil. Entre algunos de esos desafíos, está la gente que siempre tendrá opiniones —en ocasiones bien intencionadas, otras veces intrusivas o abusivas— sobre lo que deberíamoss hacer, cómo deberíamos hacerlo e incluso quiénes deberíamos ser para que todo tenga sentido (un sentido, claro está, que para ellos). Y si no tenemos cuidado, no escuchamos con cautela y claridad, no separamos lo que es de valor y buen aporte, sus voces pueden volverse más fuertes que las nuestras, hasta incluso subestimarnos.
Compartiéndolo contigo: Por qué es importante saber lo que te gusta
Entender qué te emociona, qué te desafía positiva y enérgicamente, y qué te motiva a volver por más y dar más de ti, es esencial. Y si creo bastante que esto no se trata solo de tener pasatiempos que te fascinan; se trata, así mismo, de construir una vida alineada con tu personalidad, fortalezas y valores. Y muy bien sabido, cuando inviertes tiempo en lo que realmente te interesa, no solo desarrollas habilidades, sino que también creas un propósito con verdadero signíficado para ti, e incluso, en donde no tienes que verte como perdedor (y lo menciono porque en muchas conversaciones, algunas personas tienden a ver nuestros procesos creativos como una pérdida de tiempo).
Durante momentos intensos, el mundo además de mostrarse agotador, a menudo nos empuja a tener que encajar en moldes predefinidos (favoreciendo, muchas veces, a tantos otros más que a nosotros mimos), pero la verdad es que en el autoconocimiento y el crecimiento continuo, conociendo nuestra intimidad y realidad, es que nos conducirémos a una vida mucho más plena. En lugar de dejarnos llevar por las expectativas externas y la de los demás (muchos quienes ni siquieran nos ayudan o aportan nada), saber qué es lo de uno nos da confianza y dirección.
Soy de las que opino, y entiendo muy bien sobre, la importancia de aprender a comunicarnos, recordando defender y proteger nuestras voces y decisiones en algunos escenarios con firmeza: Aprende a saber defenderte por lo que tanto trabajas, exploras, creces y valoras.
No todos comprenderán tu camino-y eso no es nada nuevo-. Disciplínate y protege lo que haces.
Algunas personas podrían intentar explicarte tu propia vida, como si la conocieran mejor que tú, y con frecuencia no agrada, y no siempre resuelve quedarte callado. Y ahí es donde más creo que la comunicación se vuelve clave, y de hecho, parte de tu estilo, actitud y personalidad. Defender tu voz no significa estar a la defensiva (como me ha tocado aclarar y seguir analizando en algunos lugares); significa establecer, entre tantas cosas, los límites y dejar claro que tus decisiones son tuyas, sentidas, pensadas generalmente, válidas, independientemente de si los demás las aprueban y les agrada escucharte hablar.
Cuando alguien te insista en decirte cómo hacer las cosas, merece el intento respirar hondo y recordar:
✔️ Tienes derecho a explorar tus propios intereses.
✔️ Tu perspectiva sobre la vida es muy probable que es más valiosa que las opiniones externas.
✔️El crecimiento, siendo tema muy discutido, se logra con la experiencia, sin lugar a objeciones, no con complacer a todos –muchos menos cuando te estás conociendo mejor en cada acción y exploración.
Busca primero complacerte haciendo lo que te atrae y abriendo tu mente a ser proactivo intentado de lo nuevo que te rodea y atrae.
Anteriormente he comentado sobre un tema que también ocupó mi mente un buen rato: no necesitamoss justificar nuestra pasión ante nadie. No necesitas justificarle tu pasión a cuanta persona se te presente. Si lo que haces te hace feliz y te sienta bien, si sientes te reta de la manera correcta y si claramente notas cómo te ayuda a convertirte en una mejor versión de ti mismo, apreciado lector/a, eso es todo lo que importa.
Esta frase adicional es una que mantengo a mano para cuando la necesite, y te la comparto con cariño: «Acéptalo, vívelo»
La próxima vez que te digas con tanta emoción y sentimiento: «Es que esto es lo mío», abrázalo por completo, siéntelo, agradécelo. Es crítico aprender a utilizar nuestro tiempo en lo que nos apasiona. Invierte tu tiempo en lo que te apasiona, reconócete en cada experiencia, aprecia tus intereses, perfecciona tus habilidades y, lo más importante, no dejes que el ruido externo te ahogue tu voz interior y apague tu imagen. Porque como dicen algunos: Como es adentro, es afuera. Y en la vida necesitamos luz, no apagones.
Feliz día y gracias por visitarme 😉
#EstoEsLoMío #ComunicaciónConfiada #CrecimientoPersonal